No cabe duda que estamos frente a una creciente erosión de la credibilidad de la actual administración en el manejo económico en general y del combate de la inflación en particular. Este debilitamiento tiene múltiples causas: La falta de liderazgo en el equipo económico; la carencia de un programa anti-inflacionario coherente; la lenta reacción frente a la bonaza internacional; el desencuentro entre la política monetarias y fiscal; la hambruna de inversiones en sectores claves como hidrocarburos o electricidad; la falta de previsión del impacto económico y social de los desastres naturales que atacan al país por tercer año consecutivo; el resurgimiento de hechos de corrupción y otros problemas mas. Pero no todo es responsabilidad del gobierno. El clima de enfrentamiento, sin cuartel, creado por la oposición y la sobre politización de los temas económicos también contribuyen a la incertidumbre. Un último ejemplo de esto, es la competencia de neopopulismo en que están el Poder Ejecutivo y el Senado nacional respecto a los aumentos salariales. Yo doy 10 por ciento. Yo lo gano, ofrezco del 15 por ciento. Todos echándole gasolina al fuego de la inflación e una champa guerra que parece no tener fin.
La credibilidad es, por lo tanto, un delicado agregado psicológico que se forma a través de las expectativas de empresarios, medios de comunicación, trabajadores, amas de casa que viven y perciben de diferentes maneras tanto la administración económica como política. Para influir sobre la credibilidad no bastan las frases de efecto. Bolivia cambia, Evo Cumple, Bolivia autonómica. Revolución democrática. Estos son eslóganes vacíos, que puede llevar al gobierno, nacional o regional, a pasar del sano consejo de debo creer en todo lo que es verdad, al delirio de: en todo lo que creo es verdad.
En la década de los ochenta y con más dramatismo que en la actualidad, el gobierno de la UDP también sufrió un déficit de credibilidad, que se tradujo en la pérdida de eficacia de las políticas macroeconómicas. El gobierno de Siles intentó seis paquetes de estabilización para controlar la hiperinflación. El quinto y sexto programa eran muy parecidos al D.S. 21060, pero no funcionaron, básicamente por un problema de credibilidad. Cuando Paz Estenssoro recupera esta dimensión psicológica de la política es cuando los instrumentos económicos recuperan su potencia y eficacia. Esperemos que la administración actual no tenga que esperar la debacle para dar un golpe de timón en la administración de su credibilidad. El gobierno necesita un shock de credibilidad, una inyección de confianza que revierta las expectativas negativas, especialmente en el tema del combate a la inflación. Las causas justas, como inclusión social y étnica, que el Presidente Morales representa y defiende merecen mejores ideas y propuestas y sobre todo, se requiere una mejor administración de lo otrora fue un inmenso capital político.
Análisis económico y otras latitudes de la vida y el pensamiento
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
La dolarización, pros y contras
Javier Milei, el vencedor de las elecciones primarias en Argentina, tiene como centro de su propuesta la dolarización de la economía para ac...
-
En cuanto gobierno y oposición regional se agarran de las mechas, en un "Catch-As-Catch-Can" a cuatro caídas, vulgo agárrate como ...
-
En términos económicos y también políticos el año que despierta rebalsando de tiempo se avizora difícil, aunque los avestruces del oficiali...
-
Hace muchos años la revista inglesa, The Economist, pública el índice Big Mac, que lista el precio de esta famosa hamburguesa en varios país...
6 comments:
entre otras causas usted olvida el efecto internacional cuando una economia como la nuestra se habre a ella sin estar preparada (nunca lo estuvo) y las consecuencias son el de ser absorvida por la corriente y lo unico que logra es sobrevivir...me asusto (algo se trae) que usted calificara como medidas justas las del presidente morales...algo esta pasando...parece que la linea que separaba a los ultra-neoliberales de los estatistas se ha modificado y ahora posiblemente esta en nuestras espaldas...no sera en la espalda suya?
El problema es simple, Politica antes que Economía; Cuando la Política deberia estar regida por la economía; sin economía no es sostenible ningun modelo politico.
El "cambio" propuesto por el gobierno se dio (hasta donde se dio) por que existia una economia, heredada, que lo sustento.
//jla
Hoy el Banco Bear Stearns dejo de existir. Un ente economico casi del taman~o de Bolivia desaparecio y parece que entramos a una recesion como las del '29.
Si Bolivia marchaba mal dentro del entorno favorable que teniamos....ahora la cosas SI se pondran interesante. Esto no sera un refrio, mas bien una pulmonia para los gringos.
Parece que el mismo Fed gringo esta sufriendo de credibilidad.
¿Haciendo un lado la politica, cree usted que la medida del gobierno de prohibición de exportación del aceite influirá en la economía, de que manera, aumentará la inflación, se reducirá la producción, se perderan empleos, aumentará la inversión, se reducirá la inflación, que será en el corto y largo plazo, que sucederá en seis meses, se venderá aceite de países extranjeros, se matará la producción, haciendo un analisis objetivo, un analisis tecnico, sin hacer política, sin apasionamientos, que sucederá?????
La economia y la politica son inseparables.
Lo que si sucedera es que de aqui a 6 meses estos decretos o solo estaran en papel y seran constantemente burlados, o seran derogados.
Si sigue asi, Evo no vera el fin de su mandato.
Un acuerdo a estas alturas sería pertinente, evo y branco que se den la mano,se recuce el precio en 50 centavos, ya no se subirá mas el precio por un año o más,el aceite será subvencionado,se reducirá los impuestos,se deroga el decreto,a cambio se hará campaña por la nueva constitución, y todos vivirán felices y contentos y colirin colorado este cuento se ha acabado .
Post a Comment